Una campaña de la Comisión Europea trata de concienciar a los consumidores sobre la necesidad de reducir, reutilizar y reciclar los residuos. A pesar de los objetivos fijados y los éxitos alcanzados en cuanto a reciclado a escala de la UE en determinados ámbitos, los residuos siguen siendo un recurso enormemente infrautilizado en Europa.
Un estudio elaborado para la Comisión estima que si se aplicara íntegramente la legislación de la UE sobre residuos, se ahorrarían 72 000 millones de euros al año, aumentaría en 42 000 millones de euros el volumen de negocios anual del sector de la gestión y el reciclado de residuos en la UE y se crearían más de 400 000 nuevos puestos de trabajo para el año 2020.
El sitio web de «Generation Awake» (Generación despierta) invita a los visitantes a descubrir el valor de los residuos, mostrando cómo, antes de optar por tirarlos, estos pueden ser reutilizados, reciclados, intercambiados y reparados. En una página de Facebook se insta a los ciudadanos a asumir retos como la reducción del desperdicio de alimentos y del consumo de agua.
Todo el mundo queda invitado a unirse y a difundir el siguiente mensaje: hay residuos que no pueden evitarse pero que pueden transformarse en valiosos recursos, y ahorrar recursos implica ahorrar dinero.
Bajo la desenfadada campaña subyace un mensaje serio: los desperdicios contienen a menudo materiales de valor que pueden ser reintroducidos en el sistema económico. Hoy en día, la economía de la Unión Europea pierde una cantidad considerable de posibles materias primas secundarias como consecuencia de la deficiente gestión de los residuos. En 2010, la producción total de residuos en la UE ascendió a 2520 millones de toneladas, lo que representó una media de 5 toneladas por habitante y año.
Las tres erres –reducir, reutilizar y reciclar– son fundamentales para recuperar estos residuos valiosos. Reducir la cantidad de residuos es fácil. Por ejemplo, hay que pensar en el tipo de envases que escogemos al hacer la compra, si se cambian las bolsas de plástico por las de tela, si se planea mejor el menú de la semana para evitar tirar comida y si se opta por las facturas electrónicas.
Tras la reutilización, la mejor opción es el reciclaje. “El reciclaje evita la contaminación del agua y del aire que se genera por la explotación, la excavación y la tala de materias primas, y requiere menos energía para fabricar nuevos productos en comparación con la necesaria para las materias primas” que se toman directamente de la naturaleza, explican desde la campaña.
Tan sólo el 40% de los residuos domésticos en Europa se reutiliza o se recicla y, en algunos países, la cifra de los desechos que van a parar a los vertederos se incrementa hasta el 80%. Por ello, para lograr una Europa verde y sostenible, las autoridades hacen hincapié en la importancia de las decisiones individuales que pueden cambiar el planeta ahorrando agua, energía y otros recursos naturales, así como reduciendo residuos. Para conocer qué hacer se puede descargar la Guía de Consumo de la campaña Generación Despierta.